A pesar de estar en pleno siglo XXI, los mitos sobre la nutrición deportiva siguen estando muy arraigados en la población general. Y esto no solo es perjudicial a nivel de su rendimiento personal, sino que puede llegar a poner en riesgo su salud.
Si practicas deporte y te preguntas cómo alimentarte correctamente, el artículo de hoy te interesa para no caer en falsos mitos.
A continuación explicaremos los mitos más habituales que podemos encontrar sobre la nutrición deportiva.
-
Soy deportista porque hago deporte
Si vas al gimnasio 3 veces por semana no te puedes considerar deportista. El deportista es aquella persona que hace deporte cada día (o casi cada día) durante varias horas. Tu serías una persona activa. A nivel de nutrición quiere decir que:
- Tu gasto energético sube pero no como para aumentar la ingesta calórica diaria de una manera considerable.
- Debes hidratarte bien. La bebida isotónica tiene gran cantidad de azúcar, por lo que en muchas ocasiones será suficiente rehidratarse con agua tras o durante una sesión de entreno. Todo irá en función del tipo de entrenamiento que se realice, la intensidad y el tiempo.
-
Hacer varias comidas al día acelera el metabolismo.
Da igual hacer cinco o seis comidas al día en menor cantidad que dos o tres más abundantes. Ni acelera el metabolismo, ni hacen nada de nada
Lo que realmente importa al final es la calidad y la cantidad total de calorías que hayamos ingerido y no el número de comidas.
-
Como hago deporte debo tomar suplementos para alcanzar el objetivo deportivo.
No necesitas tomar batidos ni suplementos. Son ayudas que pueden ayudarnos en casos puntuales, siempre que la nutrición deportiva sea adecuada y esté adaptada a nuestras necesidades, y siempre bajo recomendación profesional.
No podemos pretender que los suplementos compensen una mala alimentación.
-
Para ganar músculo debo comer más proteínas.
Siempre pensamos que las proteínas son lo único que nos hará crecer el músculo y que cuanto más consumamos más rápido lo desarrollaremos.
Si ejercitas un músculo a través del ejercicio, este se pone fuerte. Una vez que lo estimulamos debemos alimentarlo correctamente. Las proteínas son uno de los nutrientes que necesita para crecer, pero en su justa medida, tampoco cantidades desmesuradas. Pero los músculos no necesitan de ellas. También necesitan hidratos de carbono para recuperar el glucógeno perdido y conseguir su recuperación antes.
Si la nutrición deportiva es adecuada pero no haces deporte, el músculo se queda blando y pequeño. Si haces deporte y comes adecuadamente, el resultado será satisfactorio.
-
Como hago deporte puedo comer de todo. (Esto no es hacer una buena nutrición deportiva)
La práctica habitual de actividad física hace que el gasto energético aumente. Pero esto no quiere decir que se pueda comer lo que uno quiera.
Es muy típico darnos a nosotros mismos permiso para comer comida poco saludable a cambio de hacer deporte. Lo más importante es nuestra salud. Una buena nutrición deportiva consiste en cuidar la calidad de nuestra alimentación siempre con alimentos saludables.
Eso no quita que algún día podamos permitirnos algún capricho -
Hago deporte en ayunas para quemar grasas.
Hacer deporte sin desayuno no adelgaza más que si desayunamos. El entrenamiento en ayunas no conlleva ventajas, pero sí algunos inconvenientes como fatiga temprana, posibles mareos, rendir menos, consumir proteína muscular, malestar general…
Se recomienda desayunar de forma sana y equilibrada alrededor de 90 minutos antes de practicar ejercicio para evitar que la digestión empeore nuestro rendimiento.
Si hacemos entrenamientos en ayunas, deben ser con un fin concreto y siempre pautados por especialistas, como puede ser tu entrenador deportivo, fisioterapeuta, médico…
Una buena nutrición deportiva requiere de una dieta que debe ser personalizada e influye qué tipo de ejercicio se realiza y a qué hora.
Si quieres mejorar tu composición corporal o rendimiento deportivo lo ideal sería ponerse en manos de un nutricionista deportivo para que adapte tu alimentación al deporte que estés haciendo y a tus características. También un entrenador deportivo que te haga un buen plan de entrenamientos.
De esta forma conseguirás tus objetivos y sin riesgos para tu salud.